1.O piñeiro de montaña é unha
árbore que pode medir ata 20 m de altura, pero nalgúns lugares non chega a máis
de 2 m. Para coñecer que factores abióticos podían afectar á altura da árbore
fíxose unha investigación e destacaron o vento e a temperatura. Á vista das
gráficas razoa que factor inflúe máis na altura e en que condicións o piñeiro
sería máis baixo.
2.
3.
Insectos contra las plagas
Combatir
las enfermedades y las plagas en
agricultura es indispensable para mantener y aumentar la producción.
Tradicionalmente, esas prácticas se han hecho con plaguicidas basados en
activos químicos, con el consiguiente riesgo de residuos en los suelos y en los
propios productos, si el uso no es el correcto, y con la eliminación de otros
insectos del medio que son beneficiosos para las plantas.
Algunos
problemas de residuos detectados ocasionalmente en partidas de productos
impulsaron el desarrollo de nuevos plaguicidas de baja intensidad, así como la
fabricación de plaguicidas biológicos
que tienen como principios activos un agente natural.
Frente a
estos sistemas, últimamente se está imponiendo el control biológico de las plagas mediante la utilización de
insectos. Agrobío, nacida de la mano de un proyecto de la Universidad de
Almería, ha sido la empresa pionera en estos desarrollos. Inicialmente, sus producciones
estuvieron destinadas a los invernaderos almerienses para pasar luego a los de
otras provincias, así como para su utilización en otras producciones. Hoy,
estos insectos almerienses se utilizan en explotaciones de Marruecos, Italia y
Holanda.
Combatir plagas con insectos cuesta
2.000 euros por hectárea en los invernaderos
Agrobío
está especializada en la producción de polilleros, trampas, rollos adhesivos,
así como en abejorros y todo tipo de insectos, ácaros y chinches, dentro de su
estrategia contra las plagas. El abejorro se utiliza sobre todo para trabajos
de polinización, pero se considera también muy útil como indicador de situaciones de polución. Los insectos están dirigidos
a combatir cada plaga específica de cada cultivo. Hoy hay nuevas plagas
surgidas de la importación de productos agrarios.
La
producción de insectos es diferente en función de las características de cada
animal. Un ácaro depredador se puede obtener en un periodo de una semana a una
temperatura de 25 grados y una chinche se logra en tres semanas.
La
suelta de los insectos en las explotaciones se realiza en función de las
condiciones de cada cultivo. En general, los animales no tienen gran movilidad
y permanecen en los cultivos donde se depositan. La vida de una chinche puede
situarse en dos meses, y la de un ácaro, en 20 días. Sin embargo, los insectos
se integran desde el primer momento en las plantas donde se alimentan, ponen
huevos y se reproducen, a la vez que eliminan los elementos nocivos para la
explotación.
Este sistema
de lucha contra las plagas tiene otro efecto beneficioso. Son insectos que
dejan vivir a congéneres habituales en el medio y que son a su vez enemigos
naturales de las plagas. El resultado es que se restablece el equilibrio en
el territorio. Combatir las plagas con insectos no es más costoso que
hacerlo con agroquímicos. Técnicos de Agrobío sitúan el coste medio en 2.000
euros por hectárea de invernadero.
El
control biológico de las plagas se lleva hoy a cabo sobre todo en los
invernaderos, pero también se ha desarrollado su empleo en otras producciones
como los cítricos y los frutales.
4.ACTIVIDADES:
a)Le o artigo e intenta definir os termos que
aparecen en negriña.
b)Explica a que fai referencia a frase subliñada.
c)Indica unha vantaxe e un inconvinte do control
biolóxico das pragas.